Tras terminar su licenciatura en Arquitectura, Bienvenida Dolina (Barcelona, 1981) se da cuenta de que no son precisamente edificios lo que quiere construir. Su verdadera vocación es otra: la narración. Publica un blog, que sólo leen algunos de sus amigos y extrañamente alguien desde Australia. O eso dicen las estadísticas. Hasta el momento no hay noticias de ningún mecenas potencial. Así que un día se le ocurre aprenderse uno de sus relatos y contarlo sobre un escenario.
A partir de entonces no para de crear historias desde su estructura hasta sus acabados; desde la escaleta básica hasta el atrezzo, y tras siete años narrando por diferentes escenarios de su ciudad, nace Delirios de una arquitecta en paro, su primera novela.